Nunca indemnizó a los accidentados del 7 de abril del 2016, ni tampoco ha apoyado a los 4 huérfanos de Yolanda Mijares
Juan Monrreal López
Mayo 29 de 2022
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Gómez Palacio, Durango. – El 7 de abril de 2016, una camioneta fuera de toda legalidad vehicular para transportar personas, rebota en el asfalto de la carretera, El Salto Pueblo Nuevo a la ciudad de Durango, esparciendo en cada brinco la carga excesiva que arrastra sobre la cajuela, luego, en el descontrol total da volteretas; papeles, pendones de plástico, pedazos de madera vuelan evidenciando que es propaganda del candidato priista, Esteban Villegas Villarreal, – señalado como narco, por el entonces candidato de la alianza PAN-PRD, José Rosas Aispuro, hoy aliados-, junto a los libelos jalados por la inercia de la velocidad del vehículo, 15 promotores propagandistas pagados a 100 pesos por jornada de cuando menos 12 horas, comienzan a bambolearse hasta ser echados por la borda; antes de que eso ocurra, las personas hacinadas gritan sin que con ello eviten las volteretas del automotor; la propaganda de Esteban Villegas Villarreal, queda esparcida sobre el pavimento al igual que los promotores que deshilachados yacen sin moverse, entre gemidos, gritos, lloriqueos, gestos y crujidos que emiten, por el susto, las heridas y la impotencia de ver a sus compañeros de trabaja proselitista destejidos; sólo que 2 mujeres, Yolanda Mijares Saavedra, de 31 años, y Rita Guadalupe Adame Alanís, de 32, residentes en Durango, no se mueven; yacen tendidas en la carpeta asfáltica sin vida, tumbadas porque sus cuerpos no tienen un hálito de fuerza.
La pick up, queda destrozada, en esa noche temprana, nada comparable con la oscuridad que envolverá a los 4 niños dejados en la orfandad y total desamparo por Yolanda Mijares Saavedra, reclutada por 100 pesos diarios para promover al aspirante priista Esteban Villegas, quien no había pagado desde 16 días antes, “porque no tenía fondos para hacerlo”, dijeron los reclutadores priistas a los propagandistas.
Así, el 7 de abril de 2016, la labilidad económica de los hijos de Mijares Saavedra, se extendió hasta lo afectivo, Yolanda murió, dejando a los 4 infantes sin lazos afectivos directos a excepción de la abuela materna ubicada por los censos en el grupo de pobreza extrema.
El mentiroso compulsivo, Esteban Villegas Villarreal, había dicho en eventos de campaña que “me la voy a jugar con las mujeres de Durango, y ustedes lo van a ver”, y se vio; los hijos de Yolanda Mijares Saavedra, no recibieron compensación alguna por el fallecimiento de su madre, su abuela que los cuidaba, tampoco, y a 6 años del accidente. – evitable, por cierto-, ninguna de las víctimas fue compensada, con todo y que varias de estas personas aun guardan secuelas de la desgracia, tal como Demócrata Norte de México, lo comprobó al entrevistar a algunos de ellos.
De acuerdo a varios diccionarios, “miserable” significa “ el que obra de un modo negativo, malvado, abusivo, sin consideración o respeto, que perjudica a los demás para su propio beneficio”, también, “es una persona despreciable, especialmente el que actúa con mala intención sin importarle el daño que causa a los demás”, entre muchas definiciones similares que en el caso del candidato de la alianza del PAN-PRI-PRD fusionados en “Va por Durango”, Esteban Villegas Villarreal, lo retratan de cuerpo completo.
Así que, este candidato miserable, dejó en abandono a quienes lo promovieron para gobernador en el 2016, dejándolos en el desamparo total.
Con los cuerpos exangües sobre la carretera, Villegas Villarreal, fue avisado, pero sólo se dedicó a enganchar mensajes en su página de Facebook 4 horas después del percance:
“Lamento profundamente el accidente ocurrido sobre la carretera El Salto, Pueblo Nuevo – Durango, donde tristemente perdieron la vida dos integrantes de mi equipo de trabajo. Me encuentro en el Hospital Regional del IMSS al pendiente de lo sucedido (Sic). Expreso mi solidaridad a las familias por este desafortunado suceso (ReSic)”, colgó este legajo de letras quien hoy cerrará la campaña política llena de promesas, ofrecimientos que no tienen sustento alguno, más que la demagogia de un candidato al que no le importaron las muertes de Yolanda Mijares Saavedra, y Rita Guadalupe Adame Alanís, mucho menos, la suerte de los otros accidentados, que como se dijo líneas arriba, 6 años después del infortunio, mantienen lesiones físicas permanentes por las que no recibieron compensación alguna de este cleptócrata gubernamental quien en menos de 10 años salió de la indigencia económica, una vez que fue ocupando en puestos gubernamentales.
Hablan los lesionados
“Para Esteban Villegas, la vida no vale nada; a la familia de Yolanda Mijares Saavedra, le entregó 1 mil 600 pesos después de que esta falleciera, pero no como indemnización, era lo que le debía de 16 días de promoción que no le habían pagado, por eso le dieron”, dicen los entrevistados por Demócrata Norte de México, en la ciudad de Durango.
“A la mayoría de los lesionados nunca nos entregaron un peso durante la convalecencia. Realmente nos las vimos negras; algunos de nosotros, no podemos trabajar normalmente por las secuelas que nos quedaron por las heridas; nadie del partido (PRI) nos ayudó, Esteban Villegas, mucho menos porque perdió la elección”.
“Aunque tengo muchas necesidades, no me sumé a la campaña de Esteban Villegas, aunque me volvieron a invitar los muy cínicos, y todavía me dijeron, no se le olvide que aquí tiene 100 pesos seguritos”.
Han pasado 6 años desde esta desgracia, Esteban Villegas Villarreal, nunca se preocupó por las víctimas, tampoco por los 4 huérfanos y la abuela anciana que los cuidaba mientras Yolanda Mijares Saavedra, – que falleció en el accidente-, lo promovía ¿por qué habrá de creer la ciudadanía del estado las promesas de este candidato a la gubernatura de la coalición “Va por Durango” si nunca cumplió antes?
Tanto Esteban Villegas Villarreal como la candidata de MORENA, Marina Vitela Rodríguez, se han enriquecido sustrayendo bienes del erario público, mostrando uno y otro la cleptocracia que practican, abandonando la indigencia económica. – más no mental- sin cambiar un ápice la concepción que tienen de la administración pública, “el poder es para enriquecerse”.
Vienen otros 6 años de atraso para Durango, acompañado de viejos y nuevos cleptócratas.
Twitter: @jmonrreall