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A Humberto Moreira, le falló el ritmo

Humberto Moreira deja cárcel española

Horizonte ciudadano

Rosa Esther Beltrán Enríquez

Enero 21 de 2016

 

No hay peores monstruos para los mortales

que los falsos valores y la palabrería hueca.

Nietzsche

 

Humberto se trabó, se le ovillaron los pies y cayó, se desplomó, ahora sí, la hoguera mediática lo alcanzó para quemarle no sólo los pies, más bien el calcinamiento puede ser total.

La detención y encarcelamiento del profe Moreira encendió los focos rojos del priismo estatal, el que por más de 72 horas no acertaba a decir esta boca es mía, todos los connotados priistas locales de primera línea se volvieron ojo de hormiga, ni Rubén Moreira, ni Homero Ramos Gloria o Víctor Zamora acertaron a  articular palabra, estaban enmudecidos, paralizados, Humberto en la cárcel, su jefe real, imposible, insufrible; hasta el Consejo Político Estatal del PRI que se realizaría en Torreón fue suspendido.

Me parece que esos personajes, además de Ismael Ramos, Jericó Abramo y Armando Luna Canales, entre otros estarían muy ocupados, a marchas forzadas destruyendo toda la información que Rubén reservó y que no podría hacerse pública hasta el 2018, es posible.

Pero una vez que Enrique Peña Nieto afirmó que no se debían hacer ni juicios ni defensas anticipadas sobre Humberto y también Manlio Fabio Beltrones dio línea, los políticos locales recuperaron la respiración y por fin salió Rubén a decir que confía en la justicia española, yo también, para que el profe se quede en Soto del Real.

La única priista que aprobó la detención de Humberto fue Dulce María Sauri Riancho, ex presidenta nacional del PRI quien recalcó que el encarcelamiento de Humberto exhibe la impunidad que prevalece en México.

El ahora presidiario enfrenta penas que podrían alcanzar de cinco a seis años de prisión por presunta participación en lavado de capitales, malversación de caudales públicos, cohecho y organización criminal; en esto sí, bendita globalización que permitió que una indagación que inició en Texas haya sido posible continuarla en España a donde el profe dice que fue a estudiar.

La megadeuda que heredó Humberto a su hermano Rubén ha causado graves daños a las finanzas públicas de Coahuila, hecho que, por supuesto no es reconocido por el gobierno, pero, por ejemplo, solamente en el presupuesto de este año la Secretaría de la Mujer recibirá un 30 por ciento menos, también la Secretaría de Desarrollo Social tuvo disminuciones, pero la Secretaría de Salud y la de Educación durante la administración de Rubén fueron igualmente afectadas.

Rubén Moreira pretendía que Álvaro su hermano fuera el próximo alcalde de Saltillo (Reforma), ahora con la defenestración y el encarcelamiento del profe bailarín es muy probable que por fin nos quitemos de encima a la que pretendió ser la dinastía más larga de la historia de Coahuila, el moreirato.

Si tuviera una pizca de sensatez y vergüenza don Rubén habría renunciado ya al Gobierno de Coahuila, porque es obvio que durante toda su administración ha tenido buen cuidado en cuidarle las espaldas al profesor, por eso es muy pertinente que los grupos de la sociedad civil y de los partidos de oposición que ahora exigen su renuncia insistan en que es un estorbo para la imparcialidad de las investigaciones y como bien lo ha dicho Armando Guadiana, Rubén debe renunciar para evitar omisiones y complicidades.

El moreirato convirtió las arcas públicas estatales en su banco familiar, dejando a su paso pobreza y despojo, la podredumbre de la administración pública estatal se ha nutrido de la rapiña, de las complicidades sin cuento y de la impunidad; es tiempo de actuar, de abandonar la tibieza y exigir justicia en México, abajo el sistema jurásico corrupto y dinosáurico que tiene a México sumido en la desigualdad y la pobreza.

 

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