Raúl Meraz Ramírez, aporrea la acción de los alcoholímetros; un tejemaneje infame del gobierno municipal
Aunque después, reculó
*Los retenes para detectar la alcoholemia están en manos de civiles que no pertenecen a vialidad
Juan Monreal López
Abril 22 de 2025
http://www.democratanortedemexico.com
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Gómez Palacio, Durango. – Increpado por el coraje de algunos ciudadanos que han sido víctimas de los retenes ilegales que para detectar la alcoholemia en los conductores fueron instalados por la administración de la presidente municipal, Juana Leticia Herrera Ale; el candidato del PRIAN Raúl Meraz Ramírez, quien es acompañado de la impotencia porque su campaña política no interesa a los votantes de este municipio, aporreó vacilante, el pasado 15 de abril, los destacamentos erguidos en distintos puntos del municipio conocidos como alcoholímetros, tildándolos de instrumentos recaudatorios, de ser puntos de terror a los que los ciudadanos muestran más temor que confianza; atinando verdaderos puyazos a la política recaudatoria diseñada por la presidente Herrera Ale, jefa del grupo político al que pertenece.
Los pelotones en los que predominan personas civiles que no son agentes de vialidad o de la corporación policiaca, son colocados estratégicamente de tal forma que construyen verdaderas ratoneras de las que no pueden escapar quien lo intente.
Así que, con el pretexto de aplicar el detector de ebriedad los grupos que son desplazados en los puntos de revisión, se convierten en auténticas bandas de extorsión que arrancan cuando menos 10 mil pesos, a los ciudadanos que al criterio de los supuestos agentes, se le descubra aliento alcohólico.
Aprovechando la campaña electoral, algunos habitantes del ayuntamiento, se le lanzaron molestos y de frente al aspirante prianista, denunciando que esos grupos están convertidos en auténticas parvadas de extorsión que lejos de apoyar a la ciudadanía, chantajean, e, incluso cometen secuestros exprés, una vez que los aparentes funcionarios de vialidad detectaron algún grado de alcohol en los automovilistas.
Una vez tipificados con algún grado de embriaguez, llevan a los conductores en coches simulados de taxis hasta el cajero más cercano para extraer la cantidad de dinero suficiente, hasta juntar al menos 10 mil pesos, cantidad que no es reportada a las cajas de la administración.
La amenaza constante es que las multas cobradas a los conductores en el punto, “es más barato”, ya que una vez que se arrastra su coche al corralón, las sanciones económicas alcanzan cuando menos 15 mil pesos con el riesgo de que el automotor sea desvalijado, como ya ha ocurrido.
Más el tormento, no queda allí.
Si los choferes no reúnen la cuota en el punto del examen, los apócrifos oficialas autorizan llamar a los familiares de los retenidos para que éstos reúnan el monto de los 10 mil pesos, porque de lo contrario, el sancionado puede ir a parar a la cárcel.
Así, con estas denuncias,- entre muchas otras de un gobierno fallido, como lo han sido las otras 2 ocasiones en que ha detentado la presidencia municipal, Juana Leticia Herrera-, recibieron al candidato prianista en distintas calles de esta ciudad, aprovechando que por ahora, pero, sólo por ahora, los aspirantes a la alcaldía, muestran una actitud humilde, un comportamiento que no mantienen cuando los tiempos electorales no existen, tal como ha sido la historia de Raúl Meraz Ramírez, un funcionario altanero, siempre al servicio de sus superiores aunque se lastime a la ciudadanía.
Por esto, la campaña del aspirante prianista sigue en declive en todas las encuestas realizadas en este municipio.
Además, como el mismo ha dicho, no formulará propuestas de gobierno, porque piensa levantar el sentir de la gente.
Sin embargo, calle que camina, rúa en que le recuerdan que la destrucción de la poca infraestructura urbana que existía, ellos como priistas, luego como prianistas, la arruinaron, junto con la diputada federal morenista. Alma Marina Vitela Rodríguez, quién saqueó 3 años el presupuesto público municipal sin castigo alguno.
De hecho, la ciudad, es un ayuntamiento quebrado. Una localidad con desarrollo trunco. Las pésimas administraciones mutilaron las posibilidades de construir una urbe amable, con servicios de agua, drenaje y energía eléctrica para todos.
Pero ni eso se ha alcanzado.
Así que, las quejas de los ciudadanos no pueden ser rebatidas.
Meraz Ramírez, ha participado 29 años en la administración pública sin que se conozca crítica alguna a las anteriores administraciones de las que fue beneficiario.
En este contexto, Raúl Meraz, ha tenido que censurar, – contra su pesar-, el funcionamiento de los alcoholímetros llegando a calificarlos como sistemas recaudatorios.
También, tuvo que reconocer que estos puntos de revisión de beodez, “lejos de servir y proteger a los ciudadanos, en éstos, se han servido de los pobladores”, expresó.
Después reculó, como era de esperarse:
“Los operativos del alcoholímetro, aplicados hasta ahora, son dirigidos para salvaguardarla seguridad y bienestar de los gómezpalatinos”, dijo convencido.
Sería interesante que esas afirmaciones las utilizara como frases de campaña en los cruceros del municipio, para que escuche la opinión de los ciudadanos.
El asunto es que con una campaña política basada en la xenofobia, “Gómez Palacio, para los gómezpalatinos”, en alusión a la candidata de Morena, Betzabé Martínez Arango; Meraz Ramírez, vuelve a quedarse corto y no asumir que su papá, Raúl Meraz Ramírez, es oriundo de Ciudad Lerdo.
Así de pobre es la campaña electoral de este prianista, hechura de pies a cabeza en el grupo de Juana Leticia Herrera, una banda que durante décadas utilizó la xenofobia como divisa política.
La campaña de Raúl Meraz Ramírez, pinta para el fracaso.
Las distintas casas encuestadoras registran en sus números la caída constante del candidato prianista. Mientras los contrastes de las preferencias electorales crecen a favor de la candidata de Morena, Betzabé Martínez Arango.
Por si no fuera suficiente, la distancia con respecto al aspírate del Movimiento Ciudadano (MC) Omar Castañeda González, ha disminuido, e incluso, los números de algunos escrutinios han ubicado a este prianista xenófobo hasta el tercer lugar en las preferencias del voto.
Raúl Meraz Ramírez, es sin duda un candidato lanzado al sacrificio electoral por sus jefes políticos, el gobernador, Esteban Villegas Villarreal y la presidente municipal, Juana Leticia Herrera.
Los daños colaterales de esta derrota, no son significativos en el mapa del control de daños.
Al hoy aspirante del PRIAN se le conformará con un puesto burocrático, otra vez.
En tanto se consuman las votaciones del próximo 1 de junio, Meraz Ramírez, seguirá atorado cual vil coche atascado, sin poder salir hacia adelante o hacia atrás.
El mal gobierno de sus patrocinadores, sumados a los favores políticos de los que ha sido beneficiario, lo convierten en un candidato dócil con sus jefes, incapaz de increpar por los daños y desastres ocasionados por el gobierno estatal y municipal.
Le vienen más señalamientos de los ciudadanos, a los que simplemente no les tiene respuestas positivas.
X: @jmonrreall