El morenista recibió advertencia de la IEPC por amenazar e insultar a la Sindica del ayuntamiento, María Teresa Valdez Arreola, a raíz de que la funcionaria exigió transparencia administrativa
*Nada ha cambiado en la petición original; el manejo de los bienes públicos, sólo los conoce el presidente
Juan Monrreal López
Agosto 18 de 2024
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Mapimí, Durango. – Con fama de misógino en el pueblo de donde es originario, “porque el es muy macho”, los habitantes de Ceballos, Durango, han sido testigos de las actitudes de misoginia de Fernando Reverte Granados, presidente municipal perteneciente a MORENA, quien trasladó este desorden social y mental al ejercicio de poder que ejerce desde la alcaldía en contra de la Síndica municipal, María Teresa Valdez Arreola, quien el pasado 19 de julio denunció al edil en el Instituto Electoral y Participación Ciudadana de Durango (IEPC), por acoso, amenazas e insultos, que obligó al organismo a emitir el 20 de julio, un Procedimiento Especial Sancionador, para que detenga las intimidaciones y escarnios, en contra de la funcionaria municipal.
Según asienta el expediente IEPC-SC-PES-VPG-005/2024 las quejas presentadas ante el organismo electoral desde el pasado mes de julio, la Sindica María Teresa Valdez Arreola, recibe denuestos e infamias desde el inicio de la presente administración municipal, realidad que se acendró cuando en noviembre de 2023, la representante legal del ayuntamiento, exigió junto con otros ediles, transparencia en el manejo financiero municipal.
Frente a estas peticiones que la Ley Orgánica del Municipio Libre del Estado de Durango y la Ley de Disciplina Financiera, establecen como obligatorio en el manejo de los bienes públicos, el misógino, Fernando Reverte Granados, ha respondido con el ocultamiento de las Cuentas Públicas, pese al procedimiento sancionador del IEPC.
Ebrio de poder,-en un Estado en el que los poderes fácticos son los que gobiernan, escenario al que Mapimí no es ajeno-, el morenista Reverte Granados, se mantiene sin informar, sin entregar actas de Cabildo a los regidores, -mucho menos a los ciudadanos-, con todo y que fue esta situación lo que acendró la violencia de género que desde el inicio de la administración ya había ejercido este alcalde de MORENA, ligado a la diputada plurinominal electa, ex candidata a la gubernatura, Marina Vitela Rodríguez, quien tampoco ha defendido a María Teresa Valdez Arreola.
Imbuido de la ideología sexista, Reverte Granados sigue igual; con todo y que busca la reelección.
Así que lejos de dar cumplimiento cabal a las resoluciones del IEPC, se dedica a practicar acciones populistas utilizando la pobreza patrimonial de los ciudadanos, a quienes de propia mano, entrega sandías de sus huertos, -obvio con cargo al erario municipal-, junto con despensas en las dos principales villas del municipios; Bermejillo y Ceballos, así como en la cabecera municipal, contraviniendo la ley y el discurso que tanto pregona el Presidente Andrés Manuel López Obrador, de no usar recursos públicos para promoverse a cargos públicos.
Por eso, con todo y que la resolución del IEPC, que formuló el Procedimiento Especial Sancionador, en contra de Fernando Reverte Granados, éste sigue actuando como si esta directriz no existiera, sin que el organismo electoral de Durango, tenga mecanismos que obliguen a este funcionario a solucionar las ilegalidades que dieron origen a su rechazo, discriminación, y violencia contra la Sindica María Teresa Valdez Arreola.
Es obvio que el Procedimiento Especial Sancionador, no cambiará el desorden mental de misoginia que padece Reverte Granados, que con su ideología sexista, y prejuicios contra las mujeres, busca reelegirse el próximo año, situación que seguramente impedirán las próximas reformas constitucionales que dictará el Congreso mexicano el próximo septiembre, aún así, ya tiene su plan B, armado con su equipo de truhanes que han saqueado a este municipio, confiados en que sanciones no habrá desde los otros poderes del estado, donde la delincuencia organizada manda, y en ese sentido, Reverte Granados, ha cumplido con este poder fáctico, permitiendo el incremento de las llamadas “tienditas” de narcomenudeo, expendios de vinos y licores que nunca cierran, así como la expansión de cobros de piso, que varios comerciantes han declarado a Demócrata Norte de México, solicitando anonimato, por temor a ser agredidos físicamente.
Qué bueno que el IEPC Durango dictó medidas de protección a favor de María Teresa Valdez Arreola, al ser agredida por razón de género, lástima que estas determinaciones sean casi letra muerta; más cuando son decretadas contra un presidente municipal como Fernando Reverte Granados, un morenista lleno de prejuicios arraigados en contra de las mujeres, pero, además, que considera que el valor de los hombres machos se potencia ocupando puestos de mando.
Pobre Mapimí, gobernado por un ser tan enfermo, tan corrupto e ignorante, que sólo busca enriquecerse rápidamente con los bienes públicos, como hasta ahora lo ha hecho.
Las pruebas existen; tan sólidas como la misoginia que despliega en sus actos, este alcalde morenista.
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