¡Pueblo de Gómez Palacio despierta¡
Gustavo Oteo Oropeza
Pueblo, abre los ojos, José Miguel Campillo Carrete está saqueando la ciudad y sus recursos; no permitas que nos hunda en el mar de la mediocridad y la corrupción.
Convocamos desde este impreso a todos los sectores de este municipio a unirnos y cerrar filas para rescatar y evitar que Campillo Carrete y su grupo de políticos rapaces acabe con Gómez Palacio.
Origen y balance
Campillo Carrete es la continuación de las administraciones corruptas de los RR, Ricardo y Roció Rebollo de las que él fue parte; es herencia nefasta del Rebollismo.
El gobierno de Campillo se caracteriza por ser débil, porque accedió al poder por medio de la compra de votos traficando con la pobreza.
Su triunfo está bajo sospecha a pesar de que fue la campaña electoral más costosa en la historia de la ciudad. Sin embargo bajó la votación del PRI. Asociado a esto, hubo más votos anulados que la diferencia con respecto a su oponente Augusto Avalos, por tal motivo podemos afirmar que es un gobernante espurio y deslegitimado; es producto del fraude electoral.
El fraude se convirtió en imposición, por tal motivo los gómezpalatinos la estamos pasando muy mal debido a la incapacidad de Campillo Carrete para resolver los gravísimos problemas sociales como la inseguridad, la escasez y la mala calidad del agua entre otras cosas más.
En lo que va de su administración han aumentado los polígonos de pobreza, lo cual es un retroceso en el aspecto social, es una humillación para la sociedad, sin embargo, él se regocija pues afirma que llegará más presupuesto para el municipio.
En el aspecto económico las empresas están emigrando, es el caso de LALA. Todo esto ante una nula política económica que genere inversiones productivas y empleos. Empresas y negocios están huyendo ante la ola de violencia en la que vivimos día a día los gómezpalatinos, por ello, también existe un retroceso en la economía del municipio.
La delincuencia esta imparable. Todos los días hay robos en casa habitación, a transeúntes, a pasajeros de transportes colectivos, robos a bancos, tenemos infinidad de delitos del fuero común, los ciudadanos tenemos que padecer día a día la inseguridad. El esquema de seguridad de mando único, no funciona.
El gobierno está rebasado.
Como ejemplo claro, nuestras oficinas del Centro Cultural Villista fueron un par de veces asaltadas y además sufrimos un atentado. Con un artefacto, quemaron y rafaguearon una camioneta que se encontraba estacionada afuera de nuestras oficinas.
Finalmente, vemos con tristeza que a todos los partidos Campillo los tiene apergollados. Todos guardan silencio a cambio de prebendas y no son capaces de criticar y exigir buenos resultados para los gómezpalatinos.
¡Por la democracia participativa; Centro Cultural Villista!